En Sistema.bio creemos firmemente en el empoderamiento de los agricultores y las comunidades, guiándoles hacia la sostenibilidad, la autosuficiencia y la independencia. Dentro de esta creencia está nuestra identidad como activistas medioambientales, impulsados por el compromiso de proteger la naturaleza para las generaciones futuras. A lo largo de nuestro viaje, encontramos continuamente espíritus afines que comparten nuestros valores y nuestra visión, y una de esas comunidades es ISKCON Nilachal.
Ubicada aproximadamente a 120 km de Mumbai en Talasari, Palghar, Nilachal Vedic Village es una comunidad agrícola védica que cree en vivir en armonía con el ecosistema y utilizar los dones de la naturaleza para servir a la sociedad. Durante años, la comunidad ha estado practicando la agricultura y al mismo tiempo cuidando a las 300 vacas que albergan.
En el corazón de la comunidad hay una cocina comunitaria que sirve prasadam (sacramento) a 50-60 residentes diarios y entre 400 y 500 devotos que la visitan los fines de semana. En medio de este centro comunitario residen también 16 familias, cada una dedicada a su propio servicio. Las familias tienen su propia casa con cocina independiente. Sin embargo, todas se enfrentan a un problema común: la escasez de gas para cocinar.
Durante años, la comunidad ha dependido del GLP para sus necesidades culinarias, lo que les abría el doble reto del importante gasto mensual en GLP y el difícil proceso que conlleva su obtención. Para superarlo, la comunidad instaló una planta de biogás tradicional, pero las limitaciones del sistema les obligaron de nuevo a recurrir al costoso GLP. Ante este dilema, empezaron a buscar soluciones alternativas que no sólo les proporcionaran energía limpia, sino que también estuvieran en consonancia con sus valores y creencias. Fue durante esta búsqueda de soluciones cuando descubrieron las nuestras.
En mayo de 2022, se instaló un Sistema 200 con un kit completo de biogás, anunciando una nueva era de independencia para los habitantes de la comunidad. El Sistema 200 no solo proporcionó abundante gas para satisfacer las necesidades de cocción de la cocina comunitaria, sino que la conexión se extendió a las 16 familias que viven en el área.
El impacto fue inmediato y profundo, como atestigua Khushboo Pathak, residente de la comunidad desde hace casi 8 años. Para Khushboo, como para muchos otros, el biogás supuso un alivio en su vida cotidiana. Antes de que se instalara el Sistema 200, ella también dependía del GLP para cocinar. Sin embargo, más allá del gasto mensual de casi 1,500 ₹ a 2,000 ₹, lo que más preocupaba a Khushboo y su familia era el agotador proceso de adquisición. Situados en las afueras de Talasari, obtener GLP suponía arduos viajes a lugares lejanos, con los consiguientes costos adicionales. Pero en los dos años transcurridos desde que cambió al biogás, Khushboo ha experimentado una reducción significativa del tiempo dedicado a cocinar, lo que le ha permitido disfrutar de más momentos preciosos con su familia. Ahora, el dinero que antes se gastaba en GLP se destina a otras actividades importantes, lo que enriquece sus vidas de forma desmesurada.
Mientras tanto, en la cocina comunitaria y los campos de la comunidad de ISKCON, la transformación fue igualmente notable. Gaurav Maurya, brahmachari del templo de Shri Krishna en la comunidad védica de Nilachal, contó que el gasto anterior en GLP para la cocina comunitaria ascendía a la asombrosa cifra de entre 25,000 ₹ y 30,000 ₹ mensuales. A ello se sumaba el desalentador gasto de entre 4,000 ₹ y 5,000 ₹ en fertilizantes para su granja. Sin embargo, desde la instalación, esta carga financiera ha desaparecido por completo.
Como atestiguan Khushboo y Gaurav, la transformación experimentada en la comunidad védica de Nilachal ha sido algo más que una simple bendición económica; significa una notable mejora en la experiencia culinaria de la comunidad y un cambio hacia la autosuficiencia. La instalación del biodigestor no sólo ha garantizado un suministro constante de energía, sino que también ha revitalizado su compromiso de coexistir en armonía con la naturaleza, infundiendo un nuevo sentido de optimismo a los residentes de la comunidad.