Por Elena Coll
En los últimos meses, la realidad mundial ha cambiado. La pandemia ha trastornado vidas, hospitales, sociedades y economías. Como empresa que trabaja directamente con los productores y sus familias, es importante para nosotros tener una idea clara de cómo la pandemia y su consecuente crisis económica están afectando a las miles de personas que viven de la agricultura.
La agricultura juega un papel muy importante en las economías familiares de India, con alrededor de 140 millones de hogares productores. El 70& de las familias rurales siguen dependiendo de la agricultura para su subsistencia y el 85% de los productores indios son pequeños y marginales. En una sociedad donde la agricultura desempeña un papel económico y cultural tan importante, las restricciones de transporte y las caídas de precios tienen el potencial de ser catastróficas.
Sistema.bio ha estado en India durante tres años y hemos tenido la oportunidad de trabajar en proyectos masivos en todo el país. Para tener un mejor entendimiento de cómo debemos movernos en este contexto, hemos recopilado información sobre las implicaciones que esta crisis ha tenido en pequeños y pequeñas productores de India. A continuación compartiremos nuestros hallazgos clave, con la esperanza de despertar nuestra creatividad para encontrar potenciales soluciones.
- La cuarentena llegó en el peor momento para los productores indios
Hay dos temporadas de cultivo en India, Kharif y Rabi. La cuarentena nacional llegó justo en el pico de la cosecha de Rabi, cuando cultivos como el trigo, el garbanzo, las papas, las lentejas y la mostaza estaban listos para ser cosechados. Marzo y abril son meses críticos para los productores indios, ya que es el momento en que todas las cosechas llegan a los Mandis, a los mercados. Las ventas de la cosecha de Rabi permiten a los productores comprar los insumos que necesitan (como semillas y fertilizantes) para comenzar a sembrar para la temporada de Kharif. Con los mercados vacíos los productores no tendrán ingresos y, por lo tanto, no tendrán acceso a los insumos que necesitan para continuar su trabajo.
- No hay suficientes manos trabajando los campos
Al igual que muchos países en desarrollo, India tiene un alto volumen de jornaleros: el 54.9% de toda la mano de obra agrícola cae en esta categoría. La migración, especialmente la migración interna, juega un papel importante en este sector, con cientos de trabajadores migrando de ida y vuelta en las temporadas de cosecha y siembra. Con el transporte parado y las fronteras cerradas, los trabajadores han perdido sus ingresos y los agricultores han perdido su fuerza laboral. Los salarios diarios han subido por las nubes, con aumentos que llegan al 50% en algunas áreas.
- Con mercados vacíos, los costos de producción son demasiado altos
A medida que el coronavirus comenzó a extenderse por Asia, alimentos como el arroz y el trigo vieron un aumento en las ventas debido a que las personas almacenaban productos no perecederos. Pero lo contrario ha sucedido con los productos frescos. Con los ingresos colapsados en todo el país, las familias han reducido su consumo de frutas, verduras y proteínas animales. No solo ha disminuido el consumo de la población, sino que con los hoteles y restaurantes cerrados, la demanda de productos frescos, azúcar, huevos y leche casi ha desaparecido. Los precios de las verduras han caído un 15-20%. Como la mano de obra es escasa y costosa, el costo de cosechar los cultivos y transportarlo a los mercados es demasiado alto, especialmente considerando que las ventas son muy bajas. Han habido numerosos informes de agricultores que queman sus cultivos en lugar de dejarlos pudrirse.
- Cada granja enfrenta desafíos específicos
Tal como vimos con nuestros clientes de LATAM, diferentes granjas enfrentan diferentes crisis. Con todo lo que vimos en los párrafos anteriores, también está claro que los agricultores enfrentarán diferentes obstáculos dependiendo de lo que produzcan. Los cultivos que se pueden cosechar mecánicamente, como el trigo o el arroz, pueden no tener tantos problemas como los cultivos de hortalizas frescas, ya que no dependen tanto del trabajo manual. Las granjas lecheras ven un exceso en su producción todos los días, con una reducción drástica de la demanda de leche y cayendo los precios de la mantequilla, manteca y otros productos lácteos. Finalmente, la mala información ha provocado grandes pérdidas para los avicultores, ya que parece haber una idea errónea general de que los productos avícolas portan el virus. Eso definitivamente no es cierto. Sin embargo, la sobrepoblación de animales en las granjas debido a la falta de transporte y las restricciones del mercado pone en peligro la salud de los animales y los productores.
- India enfrenta la mayor plaga de langostas en 25 años
Como si fuera poco, en las últimas semanas han llegado enormes nubes de langostas a diferentes partes de la India. Las langostas tienen una larga historia de invasión de países y devastación de campos. Para los productores, esta infestación de langostas significa enormes pérdidas en un panorama ya precario. Para el resto del país, esto significa una amenaza aún mayor para la seguridad alimentaria nacional. Según los científicos, esta plaga en particular es el resultado del calentamiento global, ya que el clima cálido y el aumento de las precipitaciones parecen crear “una condición ideal para la cría de langostas”. El gobierno indio está trabajando para controlar la infestación, con la esperanza de eliminar la plaga antes de que se reproduzca y enfocándose en garantizar un ambiente seguro para que los agricultores aprovechen al máximo sus cultivos de Kharif.
Como podemos ver, tanto en el mercado como en el campo, todo está conectado. Así como las plantas necesitan agua para crecer, los agricultores necesitan economías activas para alimentar al mundo. Y también necesitan sistemas que garanticen el acceso a todas los insumos que necesitan para su trabajo. En Sistema.bio, creemos que el nuevo mundo, el que construiremos después de esta crisis, deberá tener a la sostenibilidad, la comunidad y la resiliencia en su núcleo. Necesitamos apoyar a nuestros pequeños productores para que se tengan granjas resistentes y autosuficientes mediante la incorporación de tecnologías y prácticas agrícolas que permitan su independencia, y debemos continuar trabajando hacia soluciones creativas que cuiden nuestro planeta y ayuden a restablecer el equilibrio entre humano y naturaleza. Queremos que más agricultores produzcan sus propios insumos, más redes agrícolas que garanticen empleos seguros y salarios dignos. Queremos prácticas agrícolas sostenibles que funcionen tanto para la tierra como para quien la trabaja. Queremos más apoyo para los pequeños productores y mejores prácticas para nuestro maravilloso planeta.
